𝐑𝐚𝐮́𝐥 𝐃𝐨𝐦𝐢́𝐧𝐠𝐮𝐞𝐳/𝐅𝐢𝐫𝐦𝐚𝐬𝐦𝐱
Tras los magros resultados como coordinadora de comunicación social, Uma Freya Cortés Román fue destituida por el alcalde Amado Cruz Malpica, quien al evaluar su trabajo llegó a la conclusión que no cumplió con lo más elemental.
Este jueves el jefe de la comuna analiza algunos perfiles para tomar la decisión acerca de quién puede asumir el estratégico cargo que tiene ante sí la titánica labor de difundir las acciones más importantes del gobierno municipal y reposicionarlo ante la opinión pública.
Cruz Malpica es un estratega de la política; se ha forjado en ligas mayores, ha aquilatado experiencia, es tolerante, pero también es determinante cuando en su equipo detecta a desleales o incompetentes.
La decisión de deshacerse de la ingeniero, metida a “periodista”, ya la traía entre manos desde enero pasado el presidente municipal, sin embargo, optó por aguardar para que subsanara o corrigiera algunos aspectos vitales en la imagen pública del ayuntamiento, pero jamás demostró voluntad.
La noticia de su destitución fue aprovechada por periodistas adversarios del gobierno municipal para vender ante la opinión pública a un “alcalde misógino” que en plena conmemoración del M8 (Día Internacional de la Mujer) corría de su trabajo a Cortés Román, cuando a base de ser sinceros, la referida dama ya sabía desde la semana pasada que su suerte estaba echada.
Resulta curioso que los mismos periodistas que ayer defendieron a Cortés Román de su anunciado despido, sean los mismos que a lo largo de un año venían cuestionando al gobernante municipal por los pésimos resultados en la Coordinación de Comunicación Social ¿Sería entonces que las campañas negras se instrumentaron desde los entresijos de esta dependencia municipal sin que Amado Cruz se percatara que tenía la enemiga en casa?
Como fuere, lo cierto es que es hoy, quien asuma el honroso cargo tiene que demostrar conocimientos mínimos para comenzar de cero en la construcción de las relaciones públicas, imagen y posicionamiento en favor del gobierno de Cruz Malpica, a partir de un estrecho vinculo con todos los medios convencionales y digitales de comunicación.
Quién acepte tan importante propuesta deberá tener la suficiente honestidad para reconocer si es capaz o no de desempeñarse como la o el responsable de la comunicación e imagen de uno de los ayuntamientos más importantes de Veracruz.
El jefe del gobierno porteño sabe que 2023 es un año preeminente en lo político y en lo electoral, y que su posición -al gozar del voto de confianza de la inminente abanderada morenista a la gubernatura de Veracruz Rocío Nahle García- debe ser inflexible, fría, determinante y contundente para deshacerse de lo inservible.
De ahí, que Cruz Malpica merezca el aplauso y el reconocimiento público por hacer un alto, evaluando a conciencia lo que hasta el momento le ha funcionario e incorporando a personas comprometidas con su propio proyecto.
Que sea para bien.